La piel es el órgano más grande de nuestro cuerpo llegando a representar el 15-20% de nuestra masa y entre sus funciones está la de protección de nuestro organismo: brinda una barrera defensiva, evita la pérdida de agua, protege de agresiones externas y fabrica pigmentos que nos protegen del sol.
Para entender cómo actúan los productos que usamos debemos empezar por conocer su estructura, que se divide en tres capas.
1- Epidermis: es la más externa, formada por tejido epitelial, recubierta por una capa protectora de células muertas y su función es la de protección.
2- Dermis: es la capa intermedia, se compone de colágeno y fibras de elastina y su función es de sostén.
3- Hipodermis: o tejido subcutáneo, es la más profunda y forma un colchón adiposo cuya función es amortiguadora.
El ciclo de renovación de nuestra piel dura 4 semanas, durante las cuales las células vivas pasan del fondo de la epidermis a la superficie, por lo que es de vital importancia utilizar productos de alta cosmética que actúen en profundidad, a nivel de la dermis, para que cuando esas células "suban" a la superficie estén cuidadas y nutridas con gran cantidad de elastina y colágeno. Poco a poco los iremos descubriendo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario